
George Weah, Pelé y Romario son algunos de los futbolistas más famosos, que tras colgar las botas, dejaron el futbol para vincular su vida con la política. Kakha Kaladze es un claro ejemplo, no tan conocido como los anteriores, pero prácticamente igual de habilidoso con el balón en sus pies. Los logros deportivos del jugador son un ejemplo para todo su país, Georgia. Y eso fue lo que le permitió ser el alcalde de la capital, Tiflis.
Kaladze empezó a forjar su camino con su pasión por el futbol en el FC Samtredia; un humilde club georgiano donde se convirtió en el foco principal de la plantilla. En poco tiempo el Dinamo de Tiflis el club más grande del país se interesaría en Kaladze. De esta manera, Kakha da el mayor salto de su carrera con solo 15 años, pasando de un equipo de bajo nivel, a un equipo no muy conocido por el mundo, pero igualmente temido por todo el país, ¡todo un logro para un joven chaval!
Ya en el Dinamo de Tiflis, el joven Kaladze demostró su gran talento, con espléndidas jugadas y goles que lo condujeron a la capital de Ucrania.
El Dinamo de Kiev se hizo con el jovencísimo central por solo 280 mil euros: ¡Que poco valor tenía Kaladze en el mercado para ser todo un talento en el terreno de juego!. En el Dinamo de Kiev, Kaladze compartió vestuario con ilustres jugadores como Andriy Shevchenko y el legendario Valery Lobanovsky. Durante ese momento, el equipo de la capital ucraniana estaría en su mejor momento, experimentando una época de crecimiento, clasificándose para la Champions League, alcanzando las semifinales, en las que a pesar del esfuerzo, cayeron frente un imponente Bayern de Múnich. El georgiano conquistó tres ligas consecutivas y tres copas nacionales con el conjunto de Kiev.
Kaladze contaba con la capacidad de sacar el balón de la línea defensiva, un potente disparo con la zurda, y una increíble manera de defender, habilidades que otros jugadores de su época deseaban tener. Por eso, grandes clubes de Europa pusieron el ojo en Kaladze, mostrando mucho interés por el central georgiano. Pero finalmente, el AC Milán sería quien se haría con el gran jugador, por un valor de ni más ni menos que 16 millones de euros.
Kaladze se convertía en el primer jugador georgiano en vestir la camiseta rojinegra de los rossoneris, es decir del Milán.
Los comienzos del jugador no fueron los esperados en el club italiano, las críticas por parte de la afición, los cambios y las decisiones técnicas lo dejaron desmotivado, pero aún así no se rindió. La segunda temporada de Kaladze en el Milán fue muy diferente, el georgiano impuso su calidad, consagrándose como fiel compañero de Paolo Maldini, la leyenda del conjunto italiano. El Milán experimentó dos años dorados en los que estaban dominando tanto en su propio país como en Europa. Kaladze conquistó dos ligas de campeones con los rossoneris. En la primera, el jugador georgiano falló el tercer penalti en su primera final, pero la excelente actuación del portero del Milán, Dida otorgó el título a los de Lombardía. Su segunda Champions League se vivió de otra manera, diferente a la primera que jugó con el club italiano. Esta vez, Kaladze participó en el torneo de manera frecuente, jugando los diez últimos partidos de la competición.
Además de las dos merecidas “orejonas”, las vitrinas del georgiano se llenaron de otros trofeos como, por ejemplo: una copa de Italia, un scudetto, una Supercopa italiana, otra de la UEFA y una Copa de Mundial de Clubes de la FIFA. En este punto, Kaladze era toda una figura ejemplar para su país natal. También, muchos futbolistas jóvenes se inspiraron en él.
No obstante, Kaladze tuvo que dejar la entidad italiana por las diferencias con la directiva del club. Pero el jugador georgiano no se quedó de brazos cruzados e inmediatamente fue reclutado por el Genoa, un equipo italiano no tan fuerte como el Milán, pero igualmente respetado. Kaladze continuaría en la Serie A, la liga italiana, pero se trasladaría a las orillas del mar Liguria. La estancia de Kaladze en Génova duró dos temporadas; del 2010 al 2012, en las que jugó 57 partidos marcando únicamente dos goles como líder del conjunto genovés.

Finalmente, el futbolista anunció su retirada del futbol profesional en 2012, tras una carrera de 18 años plagadas de victorias, alegría, grandes actuaciones y goles que seguro que muchos aficionados aún recuerdan.
El defensa es uno de los futbolistas georgianos más laureados de la historia de su país gracias a sus 83 internacionalidades, 50 de estas como capitán. Además, Kaladze ha sido elegido el mejor futbolista de Georgia durante cinco años (en 2001, 2002, 2003, 2006, 2011).
El ya exfutbolista georgiano Kaladze decidió entrar en el ámbito político tras colgar las botas, dejar el deporte, como otros jugadores. En las elecciones parlamentarias de 2012, Kaladze, el recién iniciado en la política fue nombrado viceprimer ministro titular de energía de Georgia. Cuatro años más tarde, él mismo se presento otra vez a las elecciones municipales de Tiflis. Con el 51,3% de los votos venció a sus rivales, accediendo a la alcaldía de la capital georgiana.
El secuestro, posterior asesinato de su hermano menor, Leván, en 2001, fue el golpe más duro de la vida del exfutbolista. Aun así, Kaladze se planteó seguir defendiendo los derechos de Georgia, para que no vuelva a pasar algo similar al asesinato de su hermano.
En 2018 ha vuelto a ganar las elecciones por segunda vez, con más afirmación que las primeras, disfrutando tanto de la confianza, como de la admiración de la gente de su país.

Los georgianos la verdad hablan muy bien sobre Kakha como un alcalde de Tibilisi. Estan muy contentos con el.